Ordena tu pensamiento para aprender a priorizar
Según el diccionario de La Real Academia Española, las raíces de la palabra “prioridad” significan “el primero entre dos”. Asimismo, en un significado más amplio, este término hace alusión a la preferencia sobre algo respecto al tiempo o el orden. Lo cierto es que, cuando hablamos de prioridad, también hace referencia a cualquier decisión que tengamos que hacer de manera inmediata o no, y más cuando nos encontramos en una disyuntiva.
Cada uno de nosotros hemos sentido la necesidad de saber cuál de las opciones que se nos presentan es la más adecuada y la que más ganancias nos dará. Sin embargo, es un proceso personal en donde evaluamos pros y contras y, al final, nos lanzamos al ruedo con la esperanza de que escogimos lo mejor para nosotros… Pero no siempre es así.
Sin embargo, José Ignacio Méndez Gómez, conferencista con estudios en Administración y Dirección de Empresas, con conocimientos en Psicología, Sociología y Antropología, autor de cursos y del método Desarrollo de Aptitudes Personales, nos trae una propuesta interesante al momento de encontrarnos en la disyuntiva que nos arrastra la priorización, a través de su libro, Ordena tu pensamiento para aprender a priorizar.
¿Estás listo para empezar el juego?
La clave: despejar la mente
Errar está en nuestra condición como seres humanos. De hecho, por más que lo intentemos y por más sabiduría que hallamos acumulado, siempre estamos propensos a equivocarnos. Es inevitable.
Este hecho nos viene a la cabeza cuando pensamos en las decisiones que tomamos en el pasado. Incluso, de aseguro hemos caído en el círculo vicioso en donde nos preguntamos contantemente qué hubiera pasado de haber hecho las cosas diferentes. Lamentablemente, no podemos regresar el tiempo.
Es aquí cuando entran en escena las palabras “prioridad” y “priorizar”. Quizás una de las fallas que hemos cometido, se debió a que no supimos darle la importancia a aquello que realmente lo tenía por lo que nos enfrentamos a las consecuencias.
Sin embargo, no todo son malas noticias y así nos lo cuenta el autor del libro. En pocas palabras, Méndez Gómez nos indica que para aprender a priorizar correctamente, tenemos que hacer un ejercicio importante: despejar nuestra mente para aprender a pensar.
Pero, ¿cómo se aprende a pensar? Uno de los primeros pasos es tratar de tomarnos un momento, hacer una pausa y respirar. Es decir, no sucumbir en la prisa o en las acciones anticipadas.
Para ello, Méndez Gómez también nos hace una propuesta interesante. En su libro nos insta a “jugar”. Esto se logra al seguir una serie de instrucciones que nos llevarán a toparnos con frases y lecciones de vida que nos ayudarán a tomar ese momento que necesitamos cuando no sabemos muy bien qué hacer.
Esto no quiere decir que encontremos las respuestas que necesitamos, ya que eso sólo dependerá de nosotros. Más bien es una forma de ver las cosas un poco diferentes al mismo tiempo que:
– Alcanzamos el desarrollo personal.
– Mejoramos la forma de pensar.
– Aprendemos a detectar lo importante de lo que no lo es.
– Mejorar los procesos de deducción.
– Escucharemos nuestra mente para conocernos mejor.
Es un viaje que promete ser interesante. ¿Te animas