La negociación, es un arte que se prende desde pequeños, y lo hemos usado siempre, tanto en nuestra vida privada como en los terrenos laborales. El valor es parte de ella y el control de las emociones también; sin embargo, si aplicamos pasión en estos procesos, no sólo sorprenderemos a nuestros interlocutores, sino que las probabilidades de éxito aumentarán notablemente. Cada situación de nuestra vida puede convertirse en una lección magistral que nos va a enseñar, poco a poco, cómo desarrollar el arte de la negociación. Dejemos que fluya de nuestro interior.