La auto-empatía se da cuando nos volvemos hacia nuestro interior y aceptamos lo que pasa en nosotros. Dos preguntas que nos ayudan a crear esta conexión con nosotros mismos: ¿Cómo me siento? Y, ¿a qué aspiro o qué quiero en esta situación?Porque aun cuando no se pueda hacer nada con respecto a un hecho, poner palabras a estados del alma alivia la tensión interior. Y si dedicamos un tiempo a conocer nuestros sentimientos y a preguntarnos a qué aspiramos, cuáles son nuestras “necesidades”, sabremos más claramente qué hacer para satisfacerlas.La autoempatía es una forma de “egoísmo bueno”. Dale al play.
Sobre el Autor
Licenciada en Administración de Empresas (ADE) en la Universidad Complutense de Madrid. Master en educación, Experta en Inteligencia Emocional y Coaching personal, Master en Coaching Ejecutivo, Master Practitioner en Programación Neurolingüística (PNL) y candidata a la certificación en Comunicación No Violenta.